Terapia para el control de ira

Nuestro especialista en ira puede enseñarte las habilidades necesarias para manejar las emociones abrumadoras. Juntos podemos lograr que abordes tus emociones y seas esa excelente persona que deseas ser.

Identifica los problemas para acudir a terapia

Tienes un fuerte sentimiento de disgusto
Reaccionas intensamente al estrés, al fracaso o la injusticia
Tus emociones van desde una leve irritación hasta una ira total y descontrolada
Has roto objetos, dañado o agredido físicamente a otras personas o a ti mismo
Tu ira te ha generado problemas familiares, sociales, de pareja, laborales llegando a despidos, rupturas de pareja, pérdida de amistades o problemas legales

Profesionales en resolver cada problemática

Explosiones de ira descontroladas y desproporcionadas a las situaciones
Suspicacia constante, sensación de sentirse burlado o humillado
Sensación de que se habla mal a tus espaldas
Incapacidad para controlar las manifestaciones de ira
Hipersensibilidad, sentirse herido con facilidad
Agresiones físicas y verbales
Desorientación temporal tras un ataque de ira

Juntos lograremos tus objetivos

Entender y gestionar tus emociones de forma saludable
Aprender a solucionar tus problemas de la mejor manera
Pensar en soluciones antes de reaccionar
Aprender a comunicar tus emociones de forma asertiva
Manejar el nivel de estrés y afrontar de forma funcional las situaciones complejas
Regular tus emociones y ser una persona asertiva

En nuestro consultorio

Valoramos y comprendemos las dificultades que surgen en la vida de cada uno de nuestros pacientes
Nos adaptamos a las necesidades únicas de cada paciente a fin de lograr los resultados deseados
Escuchamos atentamente cuáles son los objetivos y trabajamos contigo para alcanzarlos
Nuestras terapias conducen a la comprensión y resolución de los problemas de forma definitiva y duradera
La confidencialidad y privacidad de nuestros pacientes es nuestra prioridad y se mantendrá en todo momento

Testimonios de nuestros pacientes

“Toda mi familia me decía que tenia un carácter explosivo, me decían, anda a terapia, que te va a dar algo por renegar tanto. Hasta que un día tuve la presión tan alta que terminé en la clínica. Luego de llevar terapia, veo las cosas distintas y las tomo de forma más calmada”

“Mi esposo me recomendó asistir a terapia porque veía que las situaciones que estábamos pasado me ponían muy mal. Ahora me siento mucho mejor gracias a las herramientas que me dio la Dra. Es una excelente persona”

“Con su guía y apoyo, pude atravesar el momento más difícil de mi vida. La terapia es un proceso necesario para dejar hábitos negativos que ya no me servían.

“El Dr. entendió mi necesidad de ver mis propios límites. Desde los primeros momentos al conocernos, me di cuenta que entendía muy bien mi problema. Eso ayudó a profundizar en lo que necesitaba y en ser la persona que soy ahora”